Empleados de Human First luchan para llevar a una paciente a casa y son anfitriones de una campaña de donación de libros en su honor para beneficiar a los niños del St. Mary’s

Los empleados nombran a Kaitlyn Coscia, paciente del St. Mary’s, persona distinguida de la fiesta anual

 Los empleados de Human First en Lynbrook, Long Island, una organización sin fines de lucro de servicios humanitarios, fueron más allá de su deber para apoyar a jóvenes pacientes del Sistema de Cuidados de la Salud para Niños del St. Mary’s, en particular una joven cuya familia quería llevarla a casa desesperadamente.

Nacida con un defecto del corazón, a la tierna edad de 7 meses Kaitlyn Coscia sufrió un ataque. Al principio comenzó a recibir atención domiciliaria y servicios de Intervención Temprana del St. Mary’s, un proveedor líder de rehabilitación intensiva y atención médica especializada para niños con necesidades especiales debido a una enfermedad grave, lesiones o complicaciones de nacimiento prematuro.

El cuidado de Kaitlyn incluía terapia física, educación especial y terapia del habla, para ayudarla con sus retrasos en el desarrollo. Más tarde se inscribió en el programa preescolar del St. Mary’s.

Después de un segundo ataque, Kaitlyn fue admitida en el programa hospitalario del St. Mary’s, donde comenzó a realizar progresos diarios de inmediato y empezó a hacer cosas que, según les dijeron a sus padres, nunca serían posibles. Abrió sus hermosos ojos angelicales y pudo reconocer a su familia y, a veces respondía.   Kaitlyn comenzó a sentirse tan bien, que llegó el momento para que volviera a casa con su familia.

Las familias con niños con necesidades especiales tienen mucho por qué preocuparse, incluso hacer que sus hogares sean accesibles a personas discapacitadas para adaptarse a las necesidades del niño. Desafortunadamente, el estado se negó a modificar la casa de Kaitlyn, debido a un vacío legal en Medicaid y fue entonces cuando intervino el equipo de caritativos empleados de Human First.

"La atención que recibió Kaitlyn en el St. Mary’s fue tan maravillosa, que la niña superó sus problemas y estaba lista para regresar a casa. Por desgracia, tuvo que permanecer en el hospital de 2 años y medio más de lo necesario debido a la negativa del Estado a modificar su casa", dijo Mary Rendeiro, Asistente Ejecutiva de Human First.

Mary y su equipo lucharon largo y duro para llevar a Kaitlyn a casa, e incluso fueron hasta Albany para abogar por sus derechos. Después de sus convincentes argumentos, numerosos viajes y una larga batalla, el hogar de Kaitlyn fue finalmente modificado.

En la actualidad, Kaitlyn sigue sobresaliendo en el logro de sus metas bajo el cuidado del famoso Programa de atención domiciliaria del St. Mary’s, el primero en el estado de Nueva York y uno de los mayores proveedores en el país.

"Kaitlyn y su familia son muy especiales para nosotros aquí en Human First y nos sentimos muy felices por haber colaborado en la reunión de su familia", dijo Mary. "Sabemos que fue gracias al St. Mary’s que Kaitlyn pudo alcanzar sus metas y se encuentra muy bien, por lo que hemos querido darles las gracias apoyando a todos los niños del St. Mary’s y seguimos ayudando al St. Mary’s en sus esfuerzos por ayudar a todas las familias con necesidades especiales, de modo que tengan una mejor calidad de vida".

Human First celebró su fiesta anual, en la cual la pequeña Kaitlyn fue la homenajeada y sonreía de oreja a oreja.  En lugar de un tradicional Kris Kringle, todos en la fiesta compraron un libro nuevo, algunos incluso compraron un libro favorito que disfrutaban cuando eran pequeños y donaron todo a los niños del St. Mary’s.

El Sistema de Cuidados de la Salud para Niños del St. Mary’s agradece a todos los empleados de Human First por su generosidad y bondad, sobre todo durante la temporada festiva.